jueves, 3 de junio de 2010

ayer cansada de tanto llorar, cuando mis ojos no podian más, ya todo se me habia echado encima, decidí sonreir, mis ojos estaban demasiado tristes, pero yo podía conseguir sonreir, me pude delante del espejo vi mis ojos, rojos, en ese mismo instante me propuse sonreir, lo hice, ¿y sabias qué? me gustó esa sonrisilla que salía de mi boca, era graciosa, y me sentaba bien; cada vez mi sonrisa era más grande.



ella estaba sentada en el último columpio de los que había en todo el parque, sintiendo el verano sobres sus pupilas, alli estaba ella, balanceandose cada vez mas rápido, carrando los ojos, muy muy fuerte. Sin importarles los niños que la miraban a su alrededor, sin importarle lo alto que podian llegar sus pies y sus sueños..
Ella cerraba los ojos, imaginando, que era libure, que nadie le interrumpia su libertad, imaginaba ser feliz, y que no habría nadie mas que le estropeara su felicidad.
Pero eso duró poco, abrió los ojos y dejó caer lentamente los pies sobre el suelo, dejando sus sueños en el aire.